El fondo documental del Museo Provincial Eva Perón ya es una referencia en la región para la consulta y la investigación universitaria.
“Durante estos cuatro años se proyectó al museo como una referencia que da testimonio de la obra de la Fundación Eva Perón en Paraná y la provincia. Se propusieron actividades que priorizaron la memoria, el acceso a bienes culturales, la inclusión social, la cuestión de género y la interacción con la comunidad de los barrios adyacentes al organismo”, explicó la doctora Sara Liponezky, directora de este organismo.
Agregó en el balance de su gestión, que se realizó una tarea de difusión y promoción de sus acciones a través de medios de la ciudad, la provincia y también nacionales. Se construyó un intercambio de asesoramiento y apoyo institucional-académico con el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón y la Asociación Museo Evita, de la ciudad de Buenos Aires.
Comentó, además, que se desarrollaron acciones que apuntaron a la organización, sistematización, y digitalización de la valiosa documentación obrante en el Archivo que custodia, a fin de asegurar su adecuada preservación y ofrecerlo al conocimiento del público. Se trata de decenas de actas que respaldan la autenticidad de objetos históricos (que están en las seis salas y el depósito) y más de 400 planos originales correspondientes a la estructura edilicia del Complejo Escuela Hogar Eva Perón.
El Museo fue creado por Ley Provincial Nº 10.021, del 29 de marzo de 2011, en cuanto a sus incumbencias y objetivos. Y fue inaugurado el 22 de agosto de 2019; es el organismo más joven dentro de la estructura de la Secretaría de Cultura provincial. Su patrimonio muestra y narra un capítulo pleno de políticas públicas en la historia argentina.
La directora remarcó que su gestión “deja al museo provisto de una Asociación de Amigos, con personería jurídica, un apoyo institucional sustancial con la misión de apoyar las actividades y en un futuro gestar fondos por ejemplo con la venta de merchandising, que puedan solventar gastos de caja chica. Y el tejido de una estrecha relación con entidades académicas que lo proyecta como referencia para los investigadores universitarios y ámbitos superiores”.
Medidas de seguridad para su documentación
“Otro punto importante es que este año se trasladó desde el edificio del Complejo Educativo, el Archivo Histórico completo, que consta de más de 400 planos originales y decenas de actas que certifican el origen de los objetos patrimoniales. Ahora están ubicados en una de las salas de nuestro museo, bajo temperaturas ideales, con una puerta de blindex, y cubierto al igual que el resto de las colecciones por el sistema de alarmas y cámaras de seguridad”, comentó Liponezky.
El balance contempla que queda instalada una estrategia de utilización permanente –siempre que el clima lo permita– de extender las acciones a cielo abierto en el parque que lo circunda, realizando ferias, muestras temporales, teatro, recreación infantil y musicales. En estas temporadas la Radio Nacional LT14 General Urquiza realizó transmisiones desde los exteriores de las salas. Se desarrollaron con escuelas secundarias actividades didácticas de ejercicio de la ciudadanía, como por ejemplo simulacros de votación.
Durante el 2020, en cuarentena cerrada por la pandemia, toda su propuesta se desarrolló de manera virtual y el 2021 aplicó la bimodalidad, volviendo de a poco con los protocolos sanitarios estipulados. En ese marco se destacan un ciclo de videoconferencias con mujeres académicas de renombre; recorridos virtuales por sus salas proyectadas en sus redes sociales; y la producción conjunta de un video documental con el Instituto Autárquico Audiovisual de Entre Ríos, titulado Mujeres. Se trató de una vuelta por los espacios del museo y del Complejo Escuela Hogar, recordando su historia y la obra social del peronismo de los años ’50, abordado a su vez transversalmente por la cuestión de género, haciendo hincapié sobre los derechos de las mujeres y el rol que cumplen en la tarea social y política.
Grupos de becarios, mediadoras y mediadores de la Uader, generaron ideas, estrategias y programas –muchos en conjunto con otras instituciones– para optimizar la interacción entre los objetos y las personas interesadas en conocerlos. Provienen de distintas carreras, afines a la tarea del organismo. El equipo actual de Mediadores del Museo está compuesto por: la coordinadora Jimena Franco, Valentina Lomagno, Araceli Tabia, Cintia Zilloni, Yamila Albarracín, Milagros Toledo, Manuel Sanzberro, Maximiliano Solaro, Ángel Mallarino y Natasha Leikam.
Trabajo con la comunidad
Liponezky contó, por otra parte, “que el Estado es uno y lo integramos todas y todos, por lo que procuré compartir esfuerzos y apelar a la colaboración y complementariedad con otras entidades públicas y no gubernamentales. Con igual criterio y la certeza de que una condición esencial para la permanencia de las buenas obras es lograr que la Comunidad se sienta parte de ellas, organizamos la Red Museo en Comunidad”. Se trata de un tejido donde entidades solidarias, clubes de la zona, vecinales y representantes de otras dependencias situadas en el Complejo se sumaron activamente a la iniciativa, con sus propuestas, su identidad y una valiosa voluntad de compartir.
Dentro del predio, la primera aproximación fue hacia docentes y alumnos que habitan las escuelas que conforman el Complejo. Por lo que se priorizó la agenda de visitas guiadas a la comunidad educativa del mismo, como también de las y los adultos mayores que asisten al Hospital de Día Mario Bozzi que se encuadra dentro del servicio del Hospital Geriátrico Pascual Palma (dentro del Complejo). Luego, se abarcó a las escuelas ubicadas en el ejido vecinal. “Así fuimos articulando interesantes vínculos y proyectos que favorecieron el acercamiento de las infancias, las y los jóvenes estudiantes, como de hombres y mujeres asistentes al hospital de día”, concluyó la directora.